Libertadores: el anuncio que hizo la Conmebol antes de los partidos de River y Boca
El Millonario buscará remontar la serie ante Palmeiras esta noche y el Xeneize visitará al Santos el miércoles. La organización ya ultima detalles para la final que se jugará el 30 de enero en el Maracaná.
La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) confirmó hoy que la final única de Copa Libertadores, a disputarse el sábado 30 de enero en el mítico Maracaná de Río de Janeiro, comenzará a partir de las 17.
“Exactamente a las 17, hora local, echará a rodar el balón en ese mítico escenario deportivo sudamericano, con dos equipos en busca de la Gloria Eterna. El encuentro se desarrollará sin presencia de público y en estricta observancia de los protocolos sanitarios”, informó Conmebol a través de un comunicado.
Se trata de la segunda final a único partido luego de la edición de Lima 2019 cuando Flamengo, de Brasil, venció a River con un agónico 2 a 1 en el estadio Monumental.
La pandemia de coronavirus alteró los planes durante 2020 y por tal motivo el encuentro desenlace tendrá lugar el 30 de enero en Brasil.
“A pesar de las adversidades impuestas por la pandemia, la CONMEBOL mantuvo el formato de sus competiciones, sin ninguna alteración, garantizando con ello el principio de equidad deportiva para los clubes participantes, cumpliendo con sus broadcasters y sponsors y llevando el mejor fútbol del mundo a millones de hinchas en Sudamérica”, agregó la entidad.
River la tiene difícil pero igual sueña
Luego de vivir una de sus peores semanas futbolísticas de los últimos años, River deberá esta noche hacer borrón y cuenta nueva si quiere ser finalista de la Copa Libertadores. Es por eso que necesitará una remontada histórica ante Palmeiras en San Pablo, con al menos tres goles de diferencia.
El partido se jugará en el estadio “Allianz” de la ciudad paulista, a partir de las 21:30, con arbitraje del uruguayo Esteban Ostojich -acompañado en el VAR por el colombiano Nicolás Gallo-, y televisación de ESPN.
El 0-3 que sufrió como local en la cancha de Independiente de Avellaneda, una de las peores derrotas de la era del entrenador Marcelo Gallardo por contexto y formas, lo obliga al Millonario a una remontada épica. El dato poco alentador es que en la historia de la Libertadores, ningún equipo se clasificó perdiendo la ida por tres goles como local.